Cráneo-Sacral


La Terapia de Osteopatía Craneal (Cráneo-Sacral):

Fue desarrollada durante los años 1900-1954 por el osteópata americano W. G. Sutherland y perfeccionada por R.E. Becker y otros.
La Terapia Cráneo-Sacral fue puesta al alcance de todo público hace proximadamente 25 años gracias a J.E. Upledger y otros especialistas; y desde entonces, se sigue desarrollándo y mejorándo afionandose continuamente.

El Sistema Cráneo-Sacral
Abarca en la periferia: al cráneo, la columna vertebral y al sacro; de ahi el origen de su nombre «Cráneo-Sacral». El Sistema CS abarca internamente a la funda de nuestro sistema nervioso central junto al rítmico y fluctuante fluido cerebro espinal.

El Ritmo Cráneo-Sacral
Es una manifestación de la respiración vital y es palpable a través de todo el cuerpo mediante 6 ó 12 ciclos sutiles por minuto. Así pues, el ritmo Cráneo-Sacral es aún más lento que el ritmo de la respiración.
Un ritmo Cráneo-Sacral equilibrado y el flujo libre de otros ritmos lentos, conducen frecuentemente a un estado de relajamiento muy reconfortante. La manifestación libre de «la respiración de la vida» armoniza a través de toda su fuerza y su inteligencia interior con los diferentes sistemas corporales de una manera sutil, y actúa de manera autoreguladora hasta en el nivel celular.

Terapia craniosacral
Consiste en el suave tratamiento del fluido Craniosacral, actúa sobre el tejido conjuntivo, los huesos del cráneo, las meninges cerebrales y la funda de la médula espinal, armonizando los ritmos corporales lentos y los fluidos corporales. Todo este proceso incentiva a las fuerzas de autocuración. Mediante técnicas de palpación específicas y el contacto ligero de 3 a 5 gramos máximo de las manos sobre la cabeza y otras partes del cuerpo, se activan de forma natural la autoregulación y regeneración del cuerpo.

Craniosacral incluye también conocimientos sobre la Curación de Traumas -dentro de la Terapia Cráneo-Sacral-, así como los del «Sistema Nervioso Social». Antiguos traumas - tales como los que puedan originarse a través de caídas, accidentes, shocks, operaciones, partos- y las disfunciones crónicas; pueden llegar a disolverse de la memoria celular de forma espontánea.

Craniosacral_es simultáneamente como un «adiestramiento para la percepción» sutil para el practicante así como un «entrenamiento de concienciación» para los pacientes debido a su modalidad de trabajo orientada a la búsqueda de soluciones y a la creación de recursos durante el transcurso de la terapia suave. Los ejercicios de autotratamiento de Cráneo-Sacral asisten a los practicantes de craniosacral durante las sesiones, convirtiéndose así en una autoayuda.

A través del fortalecimiento de las fuerzas de autocuración,
y de la disolución suave de bloqueos, con craniosacral se favorece la salud.

Además también puede ser provechosa para las siguientes alteraciones fisicas:
- Asma
- Dificultades respiratorias
- Hernias de disco, problemas del nervio ciático
- Presión alta
- Depresión
- Fatiga
- Desequilibrio hormonal
- Problemas auditivos (ej: zumbido en los oídos)
- Hyperkinetismo
- Problemas de concentración y de aprendizaje
- Dolores de cabeza, migrañas
- Problemas motrices y de sensibilidad
- Insomnio
- Schock, accidentes
- Espasmos
- Estrés
- Trastornos digestivos
- Problemas dentales, de mandíbulas, rechinar de dientes

Así como también durante y después del embarazo, las fases de desarrollo o bien durante el acompañamiento a pacientes moribundos.

Craneosacral
Esta terapia es practicada por fisioterapeutas, masajistas, terapeutas corporales, naturópatas, pedagogos, parteras, personal sanitario y otros especialistas tanto en niños como adultos.
Esta terapia corporal suave es ideal para mantenerse en buen estado de salud y armonizar los niveles «cuerpo-alma-espiritu», así como también para prevenir o bien evitar trastornos psicosomáticos.
Gracias a su amplio espectro de aplicación, esta terapia actúa en forma equilibrada sobre los diferentes sistemas corporales y estimula a las fuerzas de autocuración; así se puede conseguir la relajación y la «curación desde el interior».
La relajación profunda y regeneración interna, que impactan como una fuente de juventud, elevan nuestra conciencia corporal, y aprendemos a tener así, un trato más respetuoso con nosotros y con nuestro cuerpo.